viernes, 29 de octubre de 2010

GIN TONIC

El contenido de este post no es mío, me ha llegado por mail -gracias a mi Lea-, pero me ha parecido muy interesante. El conocimiento no tiene propietario, aunque tenga autor, por eso lo dejo aquí.

"Un buen Gin Tonic puede llegar a ser un océano de sensaciones para el paladar. Sólo
se tienen que seguir los pasos con sentido común, ponerle mucho cariño y no saltarse
ninguna de las reglas básicas.

Tónica
La tónica que se va a utilizar en la elaboración de un Gin Tonic siempre debe estar
bien fría.
Las opciones más comunes de tónicas son:
La Schweppes es una tónica maquillaje, da la impresión de ser más
fresca pero lo que resulta es más engañosa ya que mitiga los aromas de
las mejores ginebras y esconde los defectos de las ginebras mediocres.
La burbuja de la Fever Tree puede parecer más fugaz pero, si se
cumplen todas las condiciones a la hora de servir un Gin Tonic, esto
es falso ya que la burbuja permanecerá hasta el ultimo trago, con la
extraordinaria ventaja de respetar el carácter y la identidad de la
ginebra, permitiéndonos apreciar con mayor nitidez la multitud de
notas de botánicos, cítricos y especias que puede llegar a ofrecernos.
La Fentimann’s es una tónica de delicada burbuja, elaborada según
métodos artesanales y que tiene la peculiaridad de incorporar un pequeño
volumen alcohólico: 0.5 º
La Q tonic es la más exclusiva de las tónicas, que utiliza en su
elaboración auténtica quinina peruana y se endulza con agave
orgánico.
La Nordic Mist no debe considerarse una excelente tónica para nuestro
Gin Tonic.
Hielo
Si es de agua desionizada, desmineralizada y descalcificada mucho mejor, pero
tampoco hay que volverse loco. Lo fundamental es que el hielo no tenga los clásicos
malos olores que se desprenden en algunos congeladores, que sea transparente y
sobre todo que esté muy muy frío. Por lo tanto, algunas bolsas de hielo (ojo, no todas
son iguales) de las que venden en las gasolineras pueden servir siempre que se
mantenga en el congelador de casa a la mínima temperatura (unos -25º).
Ginebra
Aquí se podría estar hablando durante horas, aunque posiblemente tres de las
mejores son:
Martin Miller Westbourne: En opinión de algunos expertos, la más
fresca, compleja e inquietante de las ginebras. Destilada con el
considerado como el Rolls Royce de los alambiques, formado por dos
piezas de cobre macizas fabricadas en 1903 por el mejor artesano de la
época: John Dore & Co. Otra de las claves es que solo se aprovecha el
corazón de la segunda destilación, algo único en el mundo de las
ginebras y este destilado puro sin diluir viaja hasta Islandia donde es
mezclada con el agua desmineralizada de glaciar (el agua más pura del
mundo).
Brecon: Tiene el fino y educado carácter británico, la sutileza
personificada. Procedente del parque Nacional de Brecon Beacons en
Gales. Posiblemente sea la ginebra mas apropiada para beber en
verano.
Tanqueray Ten: Suave, rotunda pero a la vez delicada, es una
ginebra perfecta para hacer de digestivo después de una comida
pesada. El hecho de que pase hasta por cuatro destilaciones hace
que sea una ginebra algo más neutra pero con un componente único
de sencillez y elegancia que es su mayor ventaja, dejando relucir los
tenues aromas cítricos de limón y pomelo. En su cuarta y última
destilación se le añaden flores de camomila.
Más ginebras “premium”:
Bombay Saphire: Untuosa, seca e intensa ginebra inglesa. Su
fórmula se basa en una receta de 1761.
Hendrick's: Elaborada en Escocia de forma artesanal, fue la
primera en incorporar ingredientes poco usuales hasta entonces:
pétalos de rosa de Bulgaria y pepino holandés.
Citadelle: Elegante ginebra francesa que recupera una antigua
receta de 1771 con nada menos que 19 botánicos en su destilación.
Magellan: Ginebra francesa de color azul turquesa que debe su
nombre a Ferdinand de Magellan, quien formuló su receta en el siglo
XVI. Se recomienda sustituir la cáscara de limón una rodaja de
manzana verde.
Bulldog: Ginebra suave y armoniosa gracias a su cuádruple
destilación a su triple filtrado. Entre sus botánicos destacan: hojas de
loto, amapola y Ojo de Dragón
Larios 12: Se trata de una de las apuestas españolas para producir
ginebras de gama “premium” incorporando en su destilación una
receta con 12 botánicos.
Junipero: Interesante ginebra estadounidense (San Francisco)
que se elabora de forma artesanal siguiendo la más pura tradición.
Su fórmula con 12 botónicos es secreta y el resultado es una
ginebra compleja, diferente y hasta intrigante.
Berkeley Square: Es sinónimo de calidad y armonía. Es una
ginebra de notas herbáceas, suave, aromática y fiel a la tradición.
Afortunadamente, cada vez se dispone de muchas más opciones para probar y elegir
la ginebra que más nos guste. A continuación se relacionan algunas más según su
precedencia.
España: Giró, Xoriguer, Master’s, Rives Especial
Francia: G’vine, Fahrenheit, Blue Ribbon
Gran Bretaña: Goa, Beefeater 24, Whitney Neill, Blackwood’s, The London Nº1,
Fitty Pounds, Hayman’s 1820.
Holanda: Zuidam, Boll’s
Estados Unidos: Bluecoat, Seagram’s
Nueva Zelanda: South
Muy importarte: LA GINEBRA DEBE ESTAR SIEMPRE EN EL CONGELADOR.
Cítricos
La clave es que el cítrico que se vaya a utilizar esté fresco, que haya pasado el menor
tiempo posible entre que se ha cogido del árbol y ha llegado a la copa. Hay que
echarle solo la cáscara del limón, ya que es ahí donde se encuentran los terpenos y
los aromas cítricos. NUNCA se debe exprimir el limón o la lima ya que el ácido cítrico
elimina casi por completo las burbujas de la tónica.
Este trozo de cáscara de limón (o lima) que se echa en la copa, no debe tener apenas
nada de la parte blanca debido a su amargor. La lima también suele ser buena
compañera pero ha de ser muy fresca y esto, desafortunadamente, es muy difícil de
encontrar.
Insisto: NUNCA se debe exprimir el limón o la lima en el Gin Tonic ya que (ver notaª) el
zumo del limón es ácido y, por tanto, al añadirlo al gin tonic estamos provocando que
se escapen rápidamente sus burbujas a la atmósfera.
(ª) Nota para iniciados: Las burbujas de los refrescos son de anhídrido
carbónico (CO2), que es la forma deshidratada del ácido carbónico (H2CO3).
Existe un equilibrio entre el CO2 de la atmósfera y el H2CO3 del agua. Además,
en el agua hay un equilibrio ente el ácido carbónico y el bicarbonato (HCO3
-).
Este equilibrio depende del pH, produciéndose tanto más ácido carbónico
cuanto más bajo sea el pH, o sea, cuanto más ácido sea el medio. Por lo
tanto, si bajamos el pH de un líquido que contenga bicarbonato se formará
ácido carbónico que escapará del líquido a la atmósfera en forma de CO2.
Copa
La copa ha de ser de cristal fino y la forma más recomendable es la
que se usa para catar los tintos de uva Merlot, ya que su forma permite
retener los volátiles aromas de dicha varietal de uva tinta, lo cual es
muy apropiado para captar los aromas cítricos de nuestro Gin Tonic.
Elaboración
Se sirven los hielos en la copa, aproximadamente unos 5 o 6 (va a depender del
tamaño de los mismos) y se mueven para enfriar la copa. Si los hielos no estuvieran
muy fríos (algo terrible) hay que quitar el agua que hayan desprendido. Luego se sirve
la ginebra, la cantidad va a depender del tipo de ginebra y del momento en el que se
vaya a consumir, por ejemplo para tomarlo de aperitivo hay que echar unos 2 cl, si lo
vamos a tomar después de una comida, mi recomendación es servir unos 4 o 5 cl,
nunca más.
Luego, se corta en vertical una rodaja grande de la cáscara del limón (incluido lo
blanco pero evitando la pulpa) y se produce el momento más emocionante de la
preparación, cuando con las manos muy limpias se gira la piel del limón hacia los
hielos mientras vemos como cae el perfume del Gin Tonic (cayendo a modo de rocío).
Desechamos ese trozo de cáscara y cortamos finamente, con un cuchillo de punta,
otro trozo de la piel del limón, en esta ocasión evitando la parte blanca, y se lo
añadimos a la copa. Removemos para que se impregne la ginebra con el perfume y
con la cáscara que hemos añadido.
Después, servimos la tónica deslizando muy lentamente sobre el hielo para no perder
burbuja, es decir hay que inclinar un poco la copa al servir la tónica. El Gin Tonic está
listo.
La educación y la cortesía aconsejan servir primero a las señoras y luego a los
caballeros y, si estos son educados, esperarán a que la persona que los haya servido
se haya podido lavar y secar las manos para poder disfrutar también del suyo a la
misma vez.
Observaciones
El tiempo de duración del Gin Tonic es de unos 15 minutos y tan sólo tiene unas 33
calorías (menos que un sobre de azúcar).

2 comentarios:

Unknown dijo...

Uy yo también lo he visto y no es el único, circulan por ahí otra serie de lecciones/manuales de "Este es el gin tonic perfecto" Ay, tanta categorización me cansa porque la cosa está en la experimentación, la combinación, y el maridaje que no es lo mismo que el matrimonio. Cuando hayais pasado por los experimentos de las tónicas nuevas (no olvidemos su precio, algunas tres euros el botellín) vuelve a la Schweppes, que es lo que yo he hecho, y así descubres que de maquillaje nada, que consigue sacar aromas inauditos de algunas de las ginebras más complejas, y tan premium. Besote!

Unknown dijo...

Me ha hecho gracia, Delia, que una mujer tan mundana como usted que no se casa con nadie (disculpe mi atrevimiento) vuelva al fiel regazo de la Schweppes después de sus flirteos con otras tónicas me parece una razón más que considerable para seguir su ejemplo y dejar ya de improvisar y gastar euros de más cada vez que me pido una premium.
Un saludo bella mujer!